Mabon y su profunda sabiduría
- Patricia Tanus
- 20 sept
- 3 Min. de lectura
Hay instantes en los que el alma pide detenerse. Es una breve pausa para poder observar con calma lo que hemos sembrado y lo que ahora estamos listos para cosechar. El equinoccio de otoño, celebrado en la tradición celta como Mabon, es justamente ese momento: el equilibrio perfecto entre la luz y la oscuridad, entre lo que entregamos y lo que recibimos, entre el dar y el sostenernos.

Mabon nos recuerda que la naturaleza es sabia y generosa, pero también justa. Todo lo que floreció en primavera y maduró en verano ahora se recoge, y lo que no fue cultivado queda en silencio. Esa enseñanza también toca nuestra vida interior, ya que no todo lo que deseamos se convierte en fruto, pero siempre hay algo valioso que recoger, una lección, un avance, una transformación o incluso una nueva perspectiva de vida.
El origen de esta celebración se remonta a los pueblos celtas, quienes honraban a la Madre Tierra agradeciendo las cosechas y preparando su espíritu para la temporada oscura. Era un momento de ritual, de gratitud y de reflexión, donde se reconocía que cada ciclo tiene un cierre y cada cierre abre espacio a algo nuevo.
Traer esa sabiduría a nuestra vida actual nos invita a conectar con el amor propio desde un lugar profundo. Amar lo que somos también implica agradecer lo que hemos hecho, aunque no todo haya salido como imaginábamos. Implica sostener con ternura nuestros logros y también nuestras heridas. Amar lo que somos es atrevernos a mirarnos sin juicio, con la misma calma con la que se contempla el campo después de la cosecha.
Prepararnos espiritualmente para Mabon es elegir conscientemente este equilibrio. Es darnos permiso de agradecer, de soltar lo que ya cumplió su propósito y de abrazar con suavidad nuestro propio proceso. No se trata de exigencia, sino de escucha. Caminando con un nuevo ritmo hacia lo nuevo, y dar paso al reconocimiento de nuestra autosuficiencia. Pues si algo podemos valorar es que cada paso ha tenido un sentido y nuestra historia merece ser celebrada.
Aquí comparto seis formas que pueden ayudarte a prepararte y a integrar este Mabon desde el amor propio:
Haz una pausa consciente al final del día y reconoce algo que lograste, por pequeño que parezca. Cada semilla cuenta.
Crea un espacio simbólico en tu casa, coloca frutas, velas o flores como ofrenda de gratitud a la vida. O incluso puedes crear un altar simbólico en un frasco e ir agregando notas sobre esos logros que has reconocido. Al finalizar Mabon puedes leer tus logros y celebrarlos a lo grande.
Escribe en tu diario o en alguna hoja aquello que deseas soltar antes de cerrar este ciclo y lo que eliges recibir en equilibrio.
Permítete descansar sin sentir culpa. El descanso también es cosecha.
Rodéate de lo que te nutre: música, lectura, silencio, naturaleza o compañía que ilumine tu corazón.
Recuerda la enseñanza de Un Curso de Milagros: “El amor no guarda resentimientos”. Mabon es también un tiempo de liberar lo que ya no tiene lugar en nuestro corazón, así como el campo se vacía para volver a sembrar. Amar lo que somos implica soltar las culpas, los juicios y las historias que hemos cargado. Cuando permitimos que el amor ocupe ese espacio, nos alineamos con el milagro de la vida misma. Ese regalo puede verse como la certeza de que somos completos tal como somos, sin necesidad de añadir ni restar nada. En este punto puedes encender una vela simbolizando aquellas emociones que elijes soltar.
Mabon nos enseña que amar la vida incluye amarnos a nosotros mismos. Que así como honramos los frutos de la tierra, también podemos honrar lo que hemos construido en el alma. Este texto no sustituye un proceso terapéutico formal. Si sientes que este tiempo de transición despierta en ti emociones que requieren un acompañamiento más profundo, estoy aquí para ti. Puedes contactarme y juntos trabajaremos en lo que necesites para sostener tu proceso con claridad y fuerza interior. Aquí te dejo el enlace a mi WhatsApp para que agendemos tu sesión.
Y antes de cerrar este blog, te invito a que visites mi sitio web www.patriciatanus.com, donde encontrarás recursos de apoyo, información sobre terapias y cursos que pueden serte útiles en tu proceso. Si estás list@ para trabajar en tu conexión con Mabon y reconectar con tu soltar aquello que ya es necesario liberar, ahí tienes un espacio mágico para acompañarte.
Yo soy Patricia Tanus, y la luz sea contigo!!



Comentarios